Sus compañeros sacerdotes le llamaban con cariño “el chele David”, es conocido como un hombre muy comprometido con las comunidades, daba formación a las Comunidades cristianas y movimientos campesinos en el Centro de Formación en San Miguel “El Castaño” y en el Centro de formación “Los Naranjos” en Jiquilisco, perteneciente a la Diócesis de Santiago de María; en ese contexto de apogeo de la dictadura militar, los Obispos de ese momento no aceptaban su forma de despertar a los campesinos y campesinas, por lo que el Obispo de San Vicente Monseñor Pedro Arnoldo Aparicio, suspendió a 10 sacerdotes incluido el Padre David Rodríguez.
El padre David continuo su acompañar de su pueblo en la ciudad y el campo y al igual que el Padre Tilo Sánchez siempre estuvieron del lado del movimiento popular. El Padre David ha destacado por su don cantante, músico y compositor; algunas de sus canciones son: Mirón, David y Goliat, la canción de Misionera dedicada a las monjas mártires y muchas más. Es una persona muy querida por el movimiento popular.
El sábado 17 de diciembre se le realizo en la Comunidad Los Marranitos de Zacatecoluca, una celebración en vida y con su presencia al Padre David Rodríguez, por su gran aporte en la lucha de los pobres de El Salvador por construir un país de justicia y de solidaridad.